El Viaje de Mitigación de Emergencias: Puntos Clave de la Gestión de la Red
¿Por qué debería importar la preparación para emergencias a las empresas de servicios públicos?
Las emergencias ocurren, y no es una cuestión de si sucederán, sino de cuándo lo harán. Vivimos en un mundo cada vez más cálido. A medida que aumentan las temperaturas globales, también lo hacen la frecuencia y la intensidad de los desastres naturales.[1] A pesar de los mejores esfuerzos para prevenir catástrofes, las emergencias ocurren inevitablemente.
Esta desafortunada realidad coloca a las empresas de servicios públicos en una posición precaria. Estas compañías tienen la responsabilidad de proporcionar un suministro estable de energía a sus clientes, incluso en las circunstancias más adversas. La falta de preparación conlleva un costo humanitario devastador, uno que ninguna empresa puede permitirse pagar.
Source: FEMA Historical Disaster Declarations
Ejemplo: los incendios forestales en Maui
Podemos ver los recientes incendios forestales en Maui como un ejemplo. El incendio, uno de los más mortales en la historia de EE.UU., cobró 115 vidas y destruyó más de 2,000 estructuras en Lahaina y sus alrededores. La empresa eléctrica de Hawái reconoció su papel en la catástrofe, revelando que sus postes de madera, construidos con estándares de la década de 1960, habían superado ampliamente su vida útil proyectada. Además, no cumplían con la norma nacional de 2002 que exige que los activos eléctricos soporten vientos de hasta 105 millas por hora.[2]
Para cumplir con su deber hacia los clientes y proteger sus comunidades, las empresas de servicios públicos deben adoptar un enfoque integral y proactivo en la mitigación de emergencias. Los servicios que proporcionan—gas, agua, calefacción y electricidad—son esenciales para innumerables comunidades. Sin un acceso confiable a estos servicios, la sociedad simplemente no puede funcionar.
La fórmula para la mitigación es clara: mejor preparación equivale a una mejor respuesta.
A continuación, exploraremos estrategias, tecnologías y mejores prácticas que permiten a las empresas de servicios públicos enfrentar los desafíos de un mundo en constante cambio, garantizando que puedan mantener el suministro eléctrico y proteger a sus comunidades.
El Viaje de Mitigación de Emergencias: Cuatro Puntos Clave
Un proceso sólido de mitigación de emergencias involucra cuatro componentes esenciales:
- Gestión de la red: actividades como el análisis de la red, el fortalecimiento de la infraestructura para hacerla más resistente (por ejemplo, cableado subteráneo) y la supervisión continua para identificar vulnerabilidades.
- Gestión de riesgos: evaluación de los riesgos asociados con cada componente de la infraestructura, como postes y transformadores.
- Gestión del cliente: esfuerzos para mantener informados a los clientes sobre cortes, brindar asistencia a los afectados y ofrecer apoyo más allá del suministro eléctrico.
- Gestión del trabajo: proporcionar a los gerentes de emergencia y supervisores de campo herramientas y datos para gestionar eficientemente la respuesta a emergencias.
Gestión de la Red
La mitigación y preparación para emergencias comienzan con una gestión integral de la red.
La gestión de la red se refiere al proceso de supervisar y mantener la compleja red de generación, transmisión y distribución de energía eléctrica. Sus componentes trabajan juntos como las células de un organismo: las líneas de transmisión, transformadores, plantas generadoras y subestaciones colaboran dentro de un sistema interconectado para mantener la energía en circulación.
Cada activo desempeña un papel vital en el funcionamiento del sistema, y su correcta gestión es clave para la mitigación de emergencias. Una gestión eficaz de la red implica tres componentes principales:
- Análisis de la Red
- Fortalecimiento de la Red
- Supervisión de la Red
Análisis de la Red
El análisis de la red es el primer paso crucial para garantizar una correcta gestión de la infraestructura.
Este análisis busca comprender el estado actual de la red, identificar vulnerabilidades y evaluar su capacidad para satisfacer la demanda eléctrica. Implica la recopilación de datos sobre diversos componentes, incluidas instalaciones de generación de energía, subestaciones, transformadores, líneas de transmisión y otra infraestructura crítica.
Es importante recordar que cada activo de la red requiere un análisis y acción individual. Algunos factores clave a considerar durante el análisis de la red para la mitigación de emergencias incluyen:
Antigüedad del activo: ¿Está un activo cercano al final de su ciclo de vida o fue instalado recientemente? La infraestructura antigua requiere atención inmediata, ya que es más propensa a sufrir daños por vientos fuertes, incendios y otras circunstancias inesperadas.
Ubicación del activo: ¿Está ubicado en una ciudad densamente poblada, donde podría ser vulnerable al robo o vandalismo? ¿Está expuesto a vientos fuertes en una zona propensa a incendios? Comprender los riesgos asociados con la ubicación física del activo es clave para prepararlo adecuadamente y evitar cortes de energía.
[1] Penny Gusner, “Natural Disaster Facts And Statistics 2023,” Forbes, June 7, 2023.
[2] Jennifer McDermott and Jennifer Sinco Kellher, “Hawaii power utility takes responsibility for first fire on Maui, but faults county firefighters,” Associated Press, August 28, 2023, https://apnews.com/article/hawaii-wildfires-maui-electricity-power-utilities-1741e22bbf955b62103db6b60f5c4853